My endings are waiting to begin

Es curioso cómo la vida te va llevando a ciertos caminos o lugares que alguna vez ya recorriste.
¿Te ha pasado el tener una sensación de cosquilleo, nervio y nauseas acompañada de un bombardeo de recuerdos y escalofrío que hacen de tu caminar, un paso inseguro, tembloroso y ansioso?

Curiosamente en esta ocasión, el recuerdo y el lugar no fueron los únicos aliados. Sin haberlo pensado, el disco que había elegido escuchar en el automóvil esa tarde, fue el mismo que sonaba enaquellos ayeres. El avanzar del automóvil iba desnudando una gran cantidad de imágenes en mi mente, justamente como suele pasar en las películas, todo pasó lento, el momento se congeló y una pequeña sonrisa se pintó en mi rostro, era una sonrisa agridulce.

Sin pensarlo dos veces bajé del auto, caminé una vez más por aquel estacionamiento que, en su tiempo, me habría visto pasar una y mil veces más, volví a recorrer al testigo de tantas risas, llantos, enojos, alegrías, reencuentros y alguno que otro conflicto.

Continué mi recorrido mientras las imágenes continuaban golpeando mi rostro conforme avanzaba y sin darme cuenta, estaba frente a la escalera que fue cómplice de tantas cosas, aquella escalera que en aquel tiempo te parecía tan grande y bella, ahora se torna pequeña, sólida y fría, como cualquier otra escalera.
¿Recuerdas el primer "Te Quiero", el primer abrazo, el primer beso, el primer paso?

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Una parte de lo que sentí al regresar a aquel lugar, la verdad, es puro desahogo, de algo debe
servir tener blog, ¿no es cierto?